Marina Valero Rodrigo, estudiante de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Ciudad Real, Universidad de Castilla-La Mancha, resultó ganadora del VII Premio Acerinox gracias a su proyecto ‘Diseño de filamentos imprimibles de aleaciones maestras de Acero Inoxidable 316L’.

El acto, organizado por Cedinox (Asociación para la investigación y desarrollo del acero inoxidable), se celebró ayer jueves en Paraninfo Ernesto Martínez del Rectorado.

La ceremonia estuvo presidida por Ángela González Moreno, vicerrectora de Innovación, Empleo y Emprendimiento, acompañada de Francisco Javier Belzunce Varela, Catedrático de la Universidad de Oviedo y Presidente del Jurado del VII Premio Acerinox, Vicente Feliú, director de la ETSII, José Antonio Castro,  director de la Agencia de Investigación e Innovación de Castilla – La Mancha y Bernardo Velázquez Herreros, Consejero Delegado de Acerinox.

El jurado subrayó la gran calidad de los proyectos finalistas, destacando el de Marina Valero por su complejidad al alcanzar una solución optimizada para cada paso del proceso productivo superando el plano teórico logrando su aplicación en una pieza real. En palabras de la premiada, “el proyecto se basa en la técnica de Fabricación por Filamento Fundido (FFF), donde el material en forma de filamento se deposita capa a capa creando geometrías complejas en tres dimensiones. La innovación del proyecto reside en el empleo de aleaciones maestras, polvos con interesantes características no exploradas en FFF y en el uso de un modelo de cizallamiento que permite determinar las mejores condiciones de impresión”.

Bernardo Velázquez fue el encargado de entregar el premio, dotado con 3.000 euros y al que pueden aspirar los estudiantes universitarios que realicen su proyecto de fin de carrera, grado o máster relacionado con acero inoxidable. El objetivo es fomentar el conocimiento y las aplicaciones de este material entre los jóvenes arquitectos e ingenieros en el ámbito nacional.

Velázquez felicitó a la ganadora del concurso y agradeció su esfuerzo a todos los participantes, destacando el altísimo nivel de los proyectos. El Consejero Delegado de Acerinox quiso subrayar que “este premio es un ejemplo de colaboración entre empresa privada y universidades y nos sentimos orgullosos de seguir incrementando el número de instituciones educativas con las que colaboramos gracias a iniciativas de este tipo”.

Por su parte, la vicerrectora de Innovación, Empleo y Emprendimiento, Ángela González, declaró que “la intensificación de la relación con una empresa como ACERINOX, con la que compartimos los valores de excelencia y sostenibilidad, permite que cumplamos con una de las funciones que la Ley nos encomienda: la transferencia para contribuir al desarrollo económico y social, mejorando la calidad de vida del entorno más cercano.

La relación universidad-empresa se basa en la innovación, en la puesta en movimiento de los conocimientos actuales y en la generación de nuevos a través de la colaboración en investigación para la búsqueda de nuevas soluciones. La UCLM cuenta con 7 grupos de investigación (unos 90 investigadores) con capacidades en áreas de interés, tales como el desarrollo de nuevos materiales o materiales avanzados con propiedades de alto rendimiento mecánico, para aplicaciones en sectores en los que Acerinox está presente”.